POR ALIX ROMÁN
En un acto de profunda fe y recogimiento comunitario, familiares se congregaron este domingo 2 de noviembre en el Camposanto local para conmemorar el Día de los Fieles Difuntos. La ceremonia, que se llevó a cabo a las 4:00 de la tarde bajo un cielo despejado que enmarcaba el paisaje montañoso, fue presidida por el Presbítero Robert Alí Vázquez.
Los feligreses acudieron al cementerio, un lugar de descanso y memoria, para rezar por el eterno reposo de sus seres queridos. La misa se desarrolló con el sacerdote vistiendo los ornamentos morados, propios de la liturgia por los difuntos, y congregando a la comunidad junto a las tumbas que resguardan la historia del pueblo.
Un Mensaje de Esperanza y Memoria
Durante la homilía, el Pbro. Robert Alí Vázquez ofreció palabras de consuelo y esperanza, recordando la promesa de la resurrección y la importancia de mantener viva la memoria de quienes han partido. El ambiente estuvo marcado por la solemnidad y el profundo respeto, con oraciones elevadas por todos los difuntos de la comunidad y, de manera especial, por aquellos que reposan en el propio camposanto.
La voz de la comunidad se unió en oraciones como el Padrenuestro y peticiones para que «brille para ellos la luz eterna», un eco de la tradición católica que renueva la fe en la vida después de la muerte.
Fe y Tradición en el Corazón de La Playa
El evento de este 2 de noviembre reafirmó el arraigo de las tradiciones religiosas en La Playa. El camposanto, enclavado entre la verde ladera de las montañas, se convirtió en un punto de encuentro donde el dolor de la pérdida se transformó en una celebración colectiva de la vida eterna.
La significativa asistencia y la participación activa de los asistentes demuestran la vitalidad de la fe en la comunidad, que cada año cumple con esta solemne cita para honrar a sus ancestros y fortalecer los lazos que trascienden el tiempo.