Por. José Gregorio Torres
Los decretos de emergencias son herramientas que todo Estado tiene como medida que permite en ocasiones extremas, atender situaciones que ameritan la atención por parte de sus gobernantes, en casos puntuales, y en términos generales, esto significa la oportunidad de acceder a recursos del Estado de manera extraordinaria, como herramienta de emergencia y de socorro, así mismo lo contempla la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela.
A criterio de los caracheros esta situación actual de gobernabilidad en la que se encuentra su municipio, no debe privar para que el gobierno regional, de repuestas a situaciones que se han convertido en endémicas y por tanto requieren un tratamiento superior, pues si se aplican estos parámetros a los que se refiere el estado de emergencia, la mayoría de los municipios del Estado Trujillo, se encuentran incluidos, y se pone por ejemplo el caso de Carache, donde la situación con el vital líquido Ho2, es una constante que requiere la atención inmediata antes de que esto se convierta en un problema de atención internacional, pues ahora se suma, al consumo de heces fecales, el veneno de los productos químicos que se vierten en su rió único afluente que le garantiza la vida y más grave a un, el silencio con el que se viene atendiendo este caso.
No es un secreto para nadie el alto índice de sustancias prohibidas con las cuales se viene envenenado a todo un pueblo. Pues de un tiempo para acá, se han multiplicado los casos de enfermedades cancerígenas y de otras patologías alérgicas las cuales posiblemente tengan su origen en el consumo del agua contaminada, en pocas palabras en Carache están envenenando, sin que ningún gobierno haga nada por salvar a los ciudadanos de la muerte, ojala quienes hoy se dicen representantes del pueblo atiendan la señal de socorro y esta declaración de emergencia seria la oportunidad que existe para que se escuche en Venezuela y el mundo.