Por. José Gregorio Torres
Es posible que el camino a Miraflores, no se haga con marchas, eso ha quedado en el pasado, puesto que son muchas las razones por las cuales el gobierno deberá mantener al país con el déficit de combustible, las excusas serán todas, pero al final esto no permitirá que el país se movilice, es evidente que ningún gobierno ha querido entregar su poder, menos aun si este poder le ha sido conferido con un margen de participación tan grande como lo fue en tiempos del difunto Hugo Chávez. Pero eso es historia, la realidad hoy es otra, el gobierno solo cuenta con un mínimo de apoyo a sus dirigentes, ellos mismos se han encargado de derrumbar las pocas esperanzas de un pueblo.
Ya no existe el vínculo unificador entre el monstruo llamado Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) y el gobierno, y a pesar que se ha querido mantener la hegemonía, ni ellos mismos la aceptan; es lógico, el país está convencido que la única vía para sostenerse es alimentando la democracia, la libre participación y el fortalecimiento de las instituciones. Como esto no es compatible con el actual accionar del gobierno, crea por lógica una anarquía progresista, donde todo el mundo hace con su poder lo que quiere, lo cual obedece a las distintas facciones en las que se divide el PSUV, que al final lo llevará a devorarse a sí mismo.
Las convicciones iniciales de la revolución tuvieron fuerza con su líder Hugo Chávez, pero el monstruo empezó devorándolo a el mismo, no se puede olvidar aquel rumor en el Movimiento Quinta República (MVR), cuando se habló del Chavismo sin Chávez, y el que se consumó sin lugar a dudas, cuando este desapareció de la escena humana y con el también aquel famoso Fiscal General Anderson, caso que extrañamente ha sido olvidado y poco recordado por el gobierno.
En cuanto a política local, en Carache, se refleja un PSUV, sin dirección anárquico, sin esperanzas que pueda oxigenarse, porque en lugar de contar con políticos y estrategas, solo reporta una dirigencia desgastada, carente de análisis, así como con funcionarios ineptos que no dan respuesta a nada, actuando en la oscuridad y bajo la sombra de no se sabe que fracción del partido, pues se ha evidenciado cual ha sido la respuesta a estos por parte del gobierno regional, buscando con ello salvar las pocas esperanzas de un pueblo que ya ha perdido la confianza en sus representantes. ¡El camino no es fácil, pero, como el Quijote, se seguirá andando siempre adelante!.