Por. José Gregorio Torres
No se puede celebrar la semana de la lactancia materna, sin hacer justo reconocimiento a quienes formaron parte y aún a pesar del tiempo trascurrido se mantienen como referentes de una serie de proyectos que en el tiempo han dado la razón y la justificación de su existencia, es el reconocimiento y la constancia donde radica el éxito de cada una de las propuestas que se emprenden en bien de la comunidad, por tanto, debe tener sin lugar a dudas, el reconocimiento y la exaltación en honor a la verdad y como muestra de agradecimiento por tan loable labor. Es así como detrás de cada uno de estos esfuerzos para mejorar la calidad de vida de los pobladores, surgen personas como Yolanda Tarcila Gonzales.
Hablar de la Lactancia materna es hablar de Yolanda, dialogar de Yolanda es conversar de la solidaridad, constancia necesaria para que todos y cada uno de estos emprendimientos obtengan no solo el éxito y los resultados finales, sino la calidad humana con la cual deben ser asumidos. Hablando con esta bella mujer de la tercera edad, se nota la sociabilidad, pero también la fe y la esperanza como reflejo de sus luchas diarias, empieza cual rosario a desgranar sus experiencias en la lucha social, con su Virgen de Coromoto a flor de labios pero también la caricia del divino niño, que le inspira ser principal promotora del programa Lactancia Materna, no aburre su charla; repite constantemente el compromiso que debe tener cada Carachero por su suelo por su gente, por el bien de la humanidad. Es Yolanda Tarcila Gonzales, mujer protagónica que no le importa el anonimato, solo hacer el bien.
Explica el compromiso, pero, sobre todo, del colectivo, no le importa la hora para atender cualquier caso, así pasó por innumerables instituciones las más requeridas de su sentido de pertenencia, de luchas colectivas, desde el Gañan y Papelón, el Multihogar “Nuestra Señora de Coromoto”, su principal obra hoy aun en funcionamiento y de obligada visita, de su amada emisora la radio Minumboc. Instrumento fundamental para lograr objetivos colectivos, la casa del Adulto Mayor, CEDELEA, las Damas Voluntaria del Hospital “Rafael Quevedo Viloria” también la vieron pasar, allí colocó su granito de arena.
En su Iglesia predicando con el ejemplo su fe y su convicción espiritual, moral, tantas otras que el espacio y el tiempo no alcanzan para recordarlas. Ya Yolanda no es aquella de los años 80, como ser humano sensible, también ha sufrido y se siente algo cansada, pero no rendida, su mente continúa aportando ideas, quiere mostrar el documento que más fielmente recoge parte de sus luchas donde aparece sin perseguirlo, el ser coautora del libro DE LA PARTICIPACIÓN EN SALUD A LA CONSTRUCCIÓN DEL PODER POPULAR, Experiencias para el debate. De Johana Levy y Miguel Malo. (editores), allí está para la posteridad y para los interesados la obra imperecedera, un apéndice titulado “La experiencia comunitaria de la mesa Técnica de Salud de la Parroquia Carache. Por Yolanda Gonzales y María Trompetero”. En este apéndice se detalla toda la experiencia y la labor realizada para lograr al final, el reconocimiento internacional como Amigos del Niño y de la Madre, a través del programa de lactancia materna.
